Los niños, niñas y jóvenes con autismo con la aparición de la pandemia del COVID 19 y su continuidad en la actualidad se están encontrando con grandes barreras para acceder de forma plena a su derecho a la educación.
La desinformación y el desconocimiento están cerrando los caminos para que niños, niñas y jóvenes con desafíos en la comunicación, interacción social y procesamiento sensorial puedan participar en clases escolares en formatos virtuales.
Por este motivo creo que la formación de personas que puedan intervenir en el tiempo libre de niños, adolescentes y adultos con Autismo es fundamental para mejorar la calidad de vida de esta población y crear una sociedad cada vez más inclusiva.